si entendés o no entendés es lo mismo, da igual, porque al final lo que entendías terminás por desentenderlo mientras entendés lo que no entendías y cuando querés acordarte estás entendiendo todo y no entendiendo nada, pensando con las manos alrededor de una taza de café muy caliente y el humo haciéndote vapor en la nariz, evaluando muchas posibilidades que al final no van a importar porque todas van a estar igual de bien o igual de mal, todas te van a hacer llorar y gastar cajas de pañuelitos descartables y limpiarte el rimmel y todas te van a hacer reír hasta querer vomitar y hagas lo que hagas siempre va a haber canciones que te estrujen el corazón, que hagan que quieras otro nuevo, y siempre va a haber canciones que te hagan bailar sin querer y sonreír en la calle y siempre, siempre pero siempre va a haber vajilla nueva por estrenar